martes, 22 de diciembre de 2009

Un regalo de fin de año

Yair, un alumno de 4º 2ª del año pasado, me encontró por los pasillos de la escuela y me mostró sus poemas escritos en el celular. Todos buenos y quiero compartirlos porque es sencillamente genial que un ex alumno me pare y me haga leer lo que escribe. Me llena de alegría.


Lo que yo siento por ti

Lo que yo siento por ti
se puede reducir a cuatro letras:
Amor,
algo que muchas personas han tratado de provocarme,
pero que muy pocas pudieron.
Sentidos perdidos por falsos amores
que solo dejaron dolor en mi corazón.
Algo que solo tu personalidad pudo despertar.
Ahora mi vida sí vale la pena.
He recuperado una vez más
lo perdido en las batallas de la vida,
algo que otra vez quizás perderé.
Sin embargo, me gustaría retenerlo para mí
en nuestras almas, para hacer felices a nuestros corazones
que piden a gritos amor de verdad.


Poema inspirado en Oliverio Girondo
(Pueden leer el poema "Yo no sé nada" en http://www.poesia-inter.net/og32000.htm)

Yo veo,
Yo siento,
Ella ve,
Ella siente,
pero jamás va a sentir
lo que yo sentí por ella.
Yo miro.
Intento tocar, pero no puedo;
ella nunca ve que la quiero tocar
y me da la espalda.
Yo rezo por ella,
ella también por su belleza.
Yo intento despegarme de
algo que siento;
ella lo hizo desde un principio.
Todo esto cuenta hoy
la historia de mi corazón.


Frases condenadas al exilio

Frases condenadas al exilio,
días que pasan al olvido.
Eternidades difíciles de olvidar.
Letras que conforman una sola palabra,
cuyo significado no me es conocido.
Falsas expectativas de encontrar lo buscado,
metas lejanas para cumplir con mi objetivo
que solo es amar.


Almas separadas

Almas separadas,
sentimientos que nos unen.
Vidas nuevas causa de
valores sin conocer.
Amores falsos dejé atrás:
trampas eficientes para
abandonar mi corazón.
Posibilidades para revivir algo
que quizás nunca sentí.
Todo esto describe mi amor.


Estoy sintiendo algo por esa mujer

Estoy sintiendo algo por esa mujer,
el simple hecho de que ella se sonroja,
cuando algo le digo,
hace que mi corazón recupere algo que
había desaparecido en mí.
Ahora le sonrío a esta vida.
Mi alma tiene un lugar donde refugiarse,
sabiendo que ella
tieme también un lugar para refugiar la suya.
Así le digo a esta mujer todo lo que
la estoy empezando a amar.


La vida me pasó por encima

La vida me pasó por encima,
sin nada me quedé.
Todo lo que sentía se fugó.
No sé por qué sigo aquí
si la que más apreciaba
no sentía sentimiento alguno.
El día de hoy me doy cuenta
de que espero al amor:
uno de verdad, uno espontáneo que quiera ser amado
y que en verdad esté dispuesto a todo.